“Estoy esperando la lista con tranquilidad”


En menos de una semana, Los Pumas jugarán el primero de los tres partidos que disputarán antes del Mundial. Faltan sólo 37 días para el kick off de la Copa del Mundo, y los jugadores empiezan a sentir la ansiedad. Nicolás Sánchez, de 22 años, no es una excepción, pero lo toma con tranquilidad. “Si me toca estar, será un sueño cumplido”, expresó.

Desde sus comienzos en el Tucumán Lawn Tennis de Tucumán, Nicolás Sánchez debe haber estado soñando con estar donde está hoy: entrenado de cara a la Copa del Mundo. El jugador, sin embargo, mantiene los pies en la tierra y prefiere no adelantarse a lo que puede pasar. “Ya es un orgullo estar dentro de este grupo. En este momento tengo muchísimos sentimientos, pero espero con tranquilidad la lista. Si no me toca estar, sabré que deje todo de mí y seguiré trabajando pensando en el futuro”, contó Sánchez desde el anexo del SIC, donde Los Pumas siguen trabajando y entrenando con intensidad.

Hoy por la mañana, el plantel realizó ejercicios en el gimnasio, y luego practicó defensa y tackle dividido en forwards y backs, y por al tarde, entrenó el reposicionamiento defensivo y la oposición con contacto. Para Nico Sánchez, “se está realizando una gran preparación”. El apertura hizo hincapié en la importancia que tiene el tiempo que están compartiendo como grupo, tal como lo hizo el entrenador Santiago Phelan pocos días atrás: “De a poco los entrenadores empiezan a plantear el código y el sistema que quieren que desarrollemos. A medida que pasan los días y estamos más tiempo juntos, el equipo se va entendiendo mejor y eso se va a reflejar en la cancha. Estamos muy enfocados en el sistema de juego y en cómo se va a jugar”.

La convivencia y la gran cantidad de entrenamientos, tanto en Pensacola como en Buenos Aires, fortalecieron al grupo y ayudaron a que jugadores que no se conocían a que lo hagan. Al respecto, el nuevo jugador del Bordeaux manifestó: “Como grupo estamos muy bien. Casi ni se nota la diferencia entre los más grandes y los más chicos, y eso se debe a que los grandes nos hicieron sentir muy cómodos a los que venimos por primera vez”.