Inglaterra ganó el partido que tenía que ganar y se solidifica en lo más alto de la edición 2011 del Seis Naciones. Ahora lo hace en soledad ya que con el 17 a 9 por sobre Francia se sacó de encima al hasta hoy otro invicto del certamen y mayor rival en la lucha por el cetro.El partido en sí resultó muy parejo, con ambos buscando equivocarse lo menos posible con la pelota en su poder y tratando de ser ordenados defensivamente. Es por eso que el primer tiempo, en el que Inglaterra sorprendió con su empuje del scrum y en el que Francia mostró buenas intenciones al abrir la pelota, apenas pudo encontrar variantes en el tanteador mediante el uso del pie. Fue 9 a 9 merced a tres penales por lado.
La mayor diferencia del partido se marcó al iniciarse el complemento. Fua ahí donde de entrada, el try de Foden al minuto y el penal de Wilkinson a los once, donde Inglaterra encontró el aire necesario para después manejar los tiempos.
Francia se quedó sin piernas, y sin respuestas pese a los cambios, e Inglaterra, pese a que no sumó más en el tanteador, jugó con la diferencia a su favor y se coronó en un justo vencedor.El equipo de la Rosa encontró en sus terceras líneas, y en el segunda Palmer, los pilares fundamentales no solo para tacklear y contener al pak adversario, sino también los faros para producir desgaste en la defensa rival y comenzar a abrir espacios, los que no fueron aprovechados correctamente para establecer una diferencia aún mayor.
Francia se quedó sin piernas, y sin respuestas pese a los cambios, e Inglaterra, pese a que no sumó más en el tanteador, jugó con la diferencia a su favor y se coronó en un justo vencedor.El equipo de la Rosa encontró en sus terceras líneas, y en el segunda Palmer, los pilares fundamentales no solo para tacklear y contener al pak adversario, sino también los faros para producir desgaste en la defensa rival y comenzar a abrir espacios, los que no fueron aprovechados correctamente para establecer una diferencia aún mayor.